martes, 6 de abril de 2010

Se aprende a base de ostias

La vida está llena de desilusiones. Un día parece que te vas a comer el mundo, que eres más fuerte que cualquier cosa que te depare el futuro; y al minuto siguiente estás sentado, con cara de idiota, mirando la pared y pensando “no tendría que haberme hecho ilusiones”. Porque está claro que todos decimos que no nos las haremos, pero es inevitable. Cuando sabes que tienes la más mínima oportunidad de que ese algo ocurra, aunque sea una entre un millón, no puedes evitar montarte la película en tu cabeza. “Y si…”. Y si, nada. Te las haces de todas formas, aunque sea sin querer, aún sabiendo que lo más probable es que te caiga un cubo de agua fría encima y te des de morros con la realidad. Te encuentras con eso que en el fondo ya sabías que era lo que ocurriría pero que, sin querer, pensaste en otra alternativa mejor y no pudiste evitar agarrarte a ella. Sin darte cuenta.

Aún así, no es el fin del mundo… ya llegará el día en que te lleves una grata sorpresa. Supongo.

3 comentarios:

  1. No lo dudes, que un día te llevarás una gran sorpresa. Eso sí que no lo dudes :)

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  2. Me he dado cuenta de que tu y yo siempre solemos tener las mismas conversaciones pero a veces tu eras la que anima y yo la depresiva y a veces al contrario...

    Just tell yourself I'll be ok ^^

    No te ralles... Todo se supera. Lo que no mata te hace más fuerta :D Y aunque algunos seamos ya igual de duros que el diamante... Somo tambien igual de fragiles

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  3. Quedate con lo bueno que te da la vida siempre! (:
    Te sigo! ^^

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